Enamorar a una mujer, conquistar a una mujer, llegar a su corazón, o como quiera llamársele siempre ha sido un tema muy discutido por los hombres, hasta se han escrito manuales acerca del tema, pormas o frases para enamorar y la verdad es que hasta el tipo más osado siempre ha tenido dificultades para llegar al corazón de la mujer que le gusta. Pero hay que tener en cuenta algo, si lo que quieres es conquistarla, hacerla tu enamorada o futura esposa y no un simple affair o amorío de un día, tienes que tener en cuenta muchas cosas, y quizás esto es aún mucho más necesario en los hombres un tanto jóvenes e inexpertos, y en este aspecto lo que menos debe importarte es si ella busca dinero, o si le preocupará tu apariencia física, o si tiene sun cuerpo de modelo o deportista. La idea principal es tu personalidad, tu actitud, tu forma de resolver los problemas, y sobretodo lo sincero que puedes mostrarte ante ella.
Una de las cosas más difíciles que aprendemos es llevar una conversación agradable e interesante con una mujer, y en esto tienes que ser muy cuidadoso, porque lo que más toman en cuenta ellas a la hora de conocer a alguien es su manera de hablar y el tema de conversación, lógicamente fuera de otros detalles que de por sí ya habrás tomado en cuenta para una cita o una simple salida, como son el estar aseado o lucir adecuadamente. La idea de entablar una conversación que le interese a la otra parte es algo que nos pone nerviosos y muchas veces nos juega una mala pasada, pues creyendo que sabemos todo hablamos de cosas irrelevantes e inclusive desagradables para ella, convirtiéndose esto en uno de los peores problemas que nosotros, los hombres, encontramos a la hora de conversar y sobretodo al tratar de conquistar a aquella mujer que nos gusta mucho. Hay ocasiones, inclusive, en las que nos quedamos callados por completo y eso es mucho peor aún, o caemos en la reticencia, es decir decimos algo cuando no debimos hacerlo o callamos cuando debimos decir algo.
Es en este momento en que la otra parte se siente contrariada e incómoda pues piensa que de algún modo ella no está actuando bien y quizás hasta sienta que el problema es ella misma. Entonces, la situación se escapa de las manos y lo más probable es que ni tú ni ella quieran volver a verse, pensando, por tu parte, que no encontratse el tema ideal para conversar, y por parte de ella, que eras un chico aburrido y poco sociable.
Lo primero que debes meterte a la cabeza es que no necesitas buscar un tema en especial, ni hacer planes o escribir lo que vas a decir. No hay mejor plan que no tener uno. Pues lo primero que debes hacer al llegar ese momento de la cita o encuentro es saludar, como es lógico, e inmediatamente halaga lo bien que le queda su vestido o su corte de cabello, luego preguntar, sin llegar a caer en la interrogación, que hizo durante el día y seguramente empezarán a aflorar temas diversos que tanto tú como ella querrán escuchar. Lo que en psicología se llama recuerdos por asociación de ideas es lo que sucederá naturalmente a medida que crucen sus primeras palabras. Si ella te respondió que no hizo nada, entonces tú puedes proponer algo, como tomar un café o visitar algún lugar especial, pero ten en cuenta algo, si propones algo así hazlo con seguridad y sin dudas, ella notará que eres una persona que toma decisiones con firmeza y eso la hará sentir de algún modo protegida y muy a gusto.
Siempre debes pensar que ella es tan humana como tú, por más que para ti sea la mujer más bella o más especial del mundo, siempre recuerda que es sólo eso, una mujer, con defectos y virtudes, con días y noches, con alegrías y tristezas, entonces háblale como si fuera tu mejor amiga, de cualquier tema trivial, trata de ser transparente y no adoptes poses que no son las tuyas, así cuando estén conversando de estos temas, surgirán otros y otros, y hasta les faltará tiempo para terminar. Y esto es bueno no? pues esto significa que los temas de los que querían hablar se verán en otra cita o encuentro si lo quieres llamar de otro modo.
Otro punto importante es que debes mantener una conversación alegre, donde la risa juega un papel estelar, si bien es cierto que hacer reir es algo bastante difícil de por sí, y más si la otra persona pasa por algún mal momento, debes tratar de ser jovial, no caer en la vulgaridad y en esto si valga un poco pensar en algo antes del encuentro. Algo que podría ayudarte, y lo digo de manera personal, es que le hagas recordar alguna escena muy graciosa que ambos tuvieron la oportunidad de ver en televisión, siempre hay escenas de alguna película o serie animada que nos hacen reir con sólo recordarlas.
Y no dejes de hablar, los silencios prolongados son incómodos, habla siempre y trata de que sean temas sencillos, excepto si tienes una cita con alguna mujer muy culta o intelectual, pero aún con ellas lo clásico siempre va a dar buen resultado. Y si vas a tratar de ser galante o decirle que es muy hermosa, no caigas en la exageración o ella percibirá que no eres sincero.
Demás está decir que ante cualquier situación incómoda o tentadora debes mostrar tu seguridad y sobretodo tu templanza y discreción, demostrar que controlas tus impulsos y no caer en sobrepasar algunos límites.
Si ella tiene un mal día o quizás están en uno de esos días rojos trata de compartir sus emociones, dile si puedes hacer algo para que se sienta mejor, o simplemente llévala a su casa para que descanse.
Y recuerda siempre ser honesto, no hablar demás ni alardear con tus amigos, si vas invitarla a salir hazlo directamente y no utilices intermediarios como el mensaje de texto o el correo
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